Publicaba Carlos Carrete Parrondo [Hebraístas judeoconversos en la Universidad de Salamanca (siglos xv-xvi); lección inaugural del curso académico 1983-1984 (Salamanca : Universidad Pontificia] (1983) [pág. 18] que:

Y Alonso de Zamora, quien en ningún momento de su vida fue denunciado al Santo Oficio de la Inquisición por cualquier sospecha de heterodoxia, guardó, también en esta ocasión, una actitud silenciosa, prudente, contemplando –y sintiendo en profundidad– a un grupo social hostil, poderoso, al que tenía que aceptar, pero con quien no podía compartir sus proyectos esencialmente humanistas.

Lo de los «proyectos humanistas» me lo creí y me lo sigo creyendo, más por falta de una descripción más ajustada que por convencimiento absoluto. Y lo del Alfonso libre de toda sospecha y discreto pero ajeno observador de las escabechinas inquisitoriales en la Castilla presuntamente triunfal del siglo xvi, también me lo había creído por las mismas razones: por falta de otras hipótesis más ajustadas que arriesgar. Hasta ahora.

(más…)